En el siglo XXI para algo tan tradicional como una boda también hay progresos. Además del clásico vestido existen los dos piezas y los de estilo boho y vintage que van ganando presencia; a esto le podemos añadir más colores que el blanco o nacar.
L@s grandes diseñador@s proponen recuperar la máxima sofisticación en moda nupcial, sin abandonar el constante compromiso con la feminidad. De aquí que los vestidos con corte princesa cedan el paso a modelos más ceñidos, escotes más profundos y transparencias más delicadas.
La cuestión en mayúsculas sigue siendo “El Vestido”.
Para guiarte en esa tarea nada mejor que una casa de novias donde te ayudarán a elegir el estilo, el color y el modelo que más se ajuste a tu personalidad y al tipo de evento que vayas a celebrar.
Pero bajo ese vestido se esconde otro capítulo no menos importante.
En este blog queremos resaltar la importancia de la ropa interior de una novia.
Ya sea desde los tradicionales preparativos del ajuar hasta las modernas sesiones de fotos de boudoir, la protagonista siempre es y será la lencería nupcial, que tiene esa connotación de pureza y delicadeza y el poder de hacerte sentir especial desde la primera prenda que roza tu piel en ese día tan importante.
Desde El Baúl de Mari Cruz damos a la tienda especializada su lugar, somos las que ppodemos asesorarte correctamente para encontrar la lencería más bonita para ese día, la que realce tu figura y permita que luzcas el vestido elegido con la mayor elegancia y sin renunciar a la comodidad.
Y es que cada profesional tiene su campo y su labor, y la nuestra es hacerte brillar ese día desde el interior.
Si te casas este año, reserva ya tu cita en El Baúl de Mari Cruz, donde te asesoraremos y te presentaremos las mejores opciones para tí y tu elección para ese día.
La nuestra es una atención al detalle y ese día más que ninguno, los detalles importan y mucho.
Seas la novia que seas, el camino para alcanzar tus sueños debe ser un proceso ilusionante y divertido, descubriendo tendencias y concediendo deseos a esa parte de tí que siempre se imaginó vestida de blanco.
Quieres que te ayudemos?
“Sí, quiero”